Además, el perno ya no va fijado de manera solidaria a la horquilla sino que rueda por la pista del desmodrómico. Por lo que se refiere a este último, LKE ha optado por un cilindro de mayor diámetro, lo que proporciona una menor inclinación en las pistas y hace que el movimiento de las horquillas sea más flluido, mejorando los cambios de marchas. Siguiendo con la transmisión, hay que destacar una modificación en la primaria: las relaciones han pasado de 17-67 a 19-75, con la intención de reducir la fricción entre los engranajes y mejorar las prestaciones.
Teniendo en cuenta que los cambios de marchas son la principal fuente de calor en el cárter, en la fase de proyecto se ha intentado separar su área de la del mecanismo biela-manivela: el paso del agua empieza desde debajo de los cambios para enfriar la zona más caliente del cárter del motor, bajando drásticamente las temperaturas y mejorando la eficacia del mismo. Sin embargo, el canal del agua no llega a la parte delantera del cárter, precisamente porque, al pasar por una zona tan caliente, acabaría llevando el agua ahora caliente a la zona sucesiva, la cual también se calentaría, en lugar de enfriarse. Así pues, en su parte frontal, lo que el nuevo Black Blok tiene son unas aletas pronunciadas que aprovechan el impacto del aire para disipar el calor.