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Entender los errores de conducción y mejorar la configuración del chasis son dificultades que encuentran todos los padres que hacen de mecánico para sus hijos. Pero los padres a menudo no tienen los conocimientos necesarios para ayudarles a mejorar y, con el paso del tiempo, los errores pueden convertirse en costumbres difíciles de eliminar. Hemos puesto a un muchacho que corre con el kart desde hace un año en manos de Nicola Biasetto, experto mecánico del equipo de carreras Parolin Racing Kart. A continuación, sus indicaciones sobre los errores que son típicos de un piloto de la categoría MINI y sus pautas para aprender a evitarlos.
Hay que centrarse en los brazos y las piernas. O lo que es lo mismo, en el volante y los pedales, que habrá que colocar de manera correcta. El piloto debe llegar al volante con facilidad, sin doblar demasiado el busto hacia delante, pero sin que los brazos queden totalmente estirados. Si el volante está demasiado cerca, en cambio, el piloto no logra ejercer la fuerza durante el viraje, agotándose rápidamente, lo cual afecta al estilo de conducción.
Los pedales, por su parte, son los accesorios del chasis de tipo MINI en los que intervenir para ajustar la posición de las piernas; concretamente hay que fijarlos de forma que el niño llegue a pisar a fondo el pedal sin dificultad. En el caso de los pilotos más pequeños, podemos ayudarles con la pedalera, un accesorio que acerca aún más los mandos del freno y del acelerador.
Normalmente, cuando se compra un chasis <strong>la posición de conducción se ajusta en función de la estatura del niño</strong>. Pero hay que tener en cuenta que puede crecer deprisa, debido a su edad, por lo que, si la posición de los pedales sigue siendo la misma al cabo de uno o dos años, porque nos olvidamos o no le echamos cuentas, es un error. <strong>Es el padre quien tiene que darse cuenta de que la posición de conducción está mal</strong>, observando a su hijo en el kart y notando si va demasiado encogido. El mejor método para comprobar la posición es hacer que el piloto se suba al kart colocado sobre el carro y pedirle que estire la pierna para ver hasta donde puede llegar con los pies: <strong>las piernas deben quedar extendidas</strong>, pero es fundamental que el piloto llegue a pisar los pedales a fondo con facilidad. Sobre todo hay que evitar que las piernas toquen los brazos de la dirección. Si se desea, se puede intervenir también en la regulación del cable del acelerador.
En los primeros dos turnos, yo aconsejo meter la misma presión en frío en las cuatro ruedas. Podemos empezar con 0,85 bar. El objetivo es que el kart tenga la misma presión en caliente en las cuatro ruedas al final del turno. Si esto no ocurre, podemos modificar la presión en frío para compensar la diferencia. Hay que tener como referencia un valor de 1 bar de presión en caliente, que es el que permitirá que los neumáticos trabajen dentro de los parámetros correctos y ofrezca el máximo nivel de agarre. Naturalmente, además hay que tener en cuenta la temperatura ambiente: si empezamos corriendo a las 9:00 de la mañana, es probable que a las 14:00 tengamos una temperatura ambiente más elevada, por lo que nos veremos obligados a ajustar la presión en frío con un valor más bajo.