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La presión de inflado de los neumáticos es un elemento fundamental en automovilismo, y juega un papel clave para lograr el rendimiento óptimo del kart.
Vamos a imaginarnos: ¿se puede ganar una carrera de 100 metros lisos con un calzado de tamaño equivocado? Años de entrenamiento, técnica y sacrificios desperdiciados por haber errado en el tamaño del calzado.
Pues algo similar ocurre en el karting, aunque el problema, será más complicado en el caso de los neumáticos de kart que en el caso de las zapatillas deportivas de un atleta, porque los neumáticos no son estáticos, sino variables. Su presión de inflado no es un valor absoluto y estable sino se ve influido por otros parámetros como la temperatura del aire o de la pista, la puesta a punto y el material que compone el neumático. Saber cuál debe ser la presión de inflado correcta de los neumáticos en función de las condiciones de la conducción vigentes en cada caso jugará un papel clave durante su fin de semana en pista y en las carreras.
Hemos pedido a Pascal Cardinale, propietario de Prisma Electronics, (empresa especializada en la fabricación de manómetros, pirómetros y cronómetros digitales para el mundo del automovilismo), que nos oriente, con recomendaciones y aclaraciones, sobre el tema de la presión de los neumáticos de los karts.
Para comprender la importancia de la presión de los neumáticos, no hay más que tener en cuenta que todas las intervenciones de puesta a punto que se llevan a cabo tienen un único objetivo: obtener un uso óptimo de los neumáticos, único elemento de contacto entre el kart y la pista. Ya puede mejorar la conducción todo lo que quiera, y afinar la carburación al máximo, pero al final todas estas intervenciones resultarán si los neumáticos trabajan correctamente. Y para que los neumáticos funcionen de óptimamente, la presión juega un papel fundamental por dos motivos: por un lado, la presión, junto con la temperatura, es uno de los pocos indicadores útiles para analizar el funcionamiento de los neumáticos; por otro lado, la presión en frío es el único mecanismo, junto con la puesta a punto, sobre el que podemos actuar para resolver todos los problemas relacionados con la falta de rendimiento relacionada con la capacidad de conducción de un kart.