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En el karting, tal vez más que en otras disciplinas del automovilismo, la posición de conducción del piloto cumple un papel crucial para dar con la configuración apropiada y lograr la mejor actuación. Ello se debe a que el piloto, con su peso, influye de manera considerable en el peso total del conjunto kart-piloto, más que en cualquier otra categoría de coches monoplaza o de ruedas cubiertas. Como en la mayoría de las categorías de automovilismo, en el karting la posición de conducción ideal también hay que hallarla manteniendo el asiento lo más fijo posible en la posición aconsejada por el fabricante (por una cuestión de espacio y de equilibrio de las cargas) y mediante el ajuste y la posición de los accesorios estándar (como el reposapiés, los pedales, la columna de dirección) o de los extras, como los soportes adicionales para los pedales o los calces del cubo del volante. Así hasta llegar a los chasis XL, en los que es posible distanciar aún más si cabe la ubicación de los pedales y que deben emplearse solo en el caso de pilotos especialmente altos. Precisamente para entender cómo se ha de colocar cada tipo de kartista en el kart para no comprometer su configuración y su equilibrado, le hemos preguntado a una de las divisiones de carreras con más títulos de la historia del karting: el CRG Racing Team. Estas son sus respuestas.
La elección del asiento es sin duda uno de los aspectos más importantes por lo que respecta a la posición de conducción. Efectivamente, además de ajustarse como un guante al piloto, el asiento tiene que ofrecer un nivel de comodidad destacable, dejándole un mínimo de libertad de movimiento. De esta forma, el piloto no solo permanece en una posición firme y estable, sino que además consigue conducir el kart con el cuerpo, sacándole todo el partido a sus prestaciones. Para saber qué asiento es el más adecuado para nosotros, se suele probar sentándose con las manos pegadas a la altura del costado para simular la presencia de un chaleco protector. Al hacer esta prueba, además de evaluar la sensación subjetiva que experimentamos, hay que observar que la posición no sea trabajosa y comprobar que disfrutemos en todo momento de esa mínima libertad de movimiento de la que hablábamos antes. Además de por las distintas tallas disponibles, que pueden variar en función del modelo y de la marca, los asientos se diferencian también por el tipo de forma y por su grado de “apertura”, es decir, el ángulo que se forma entre el asiento y su respaldo. Para los pilotos de mayor estatura, se suele optar por un asiento más abierto, es decir, con un respaldo más inclinado hacia atrás. Entre dos modelos con ángulos diversos de apertura, puede haber hasta 4 o 5 cm de diferencia en la altura final del asiento.