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Puesto a punto del kart para pistas con restos de goma
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El kart es una "bestia" difícil de domesticar, y justo cuando crees que lo has conseguido, todo cambia y hay que volver a empezar. Se debe a las condiciones del asfalto en la pista, que cambian continuamente en función de la temperatura, cantidad de goma, humedad, etc. Cuando hay muchos restos de goma en la pista, la puesta a punto "teórica" a menudo no funciona en la práctica.
En la actualidad, normalmente, siempre buscamos el agarre, ya que los neumáticos son más duros que antes, tanto en términos de sus componentes como de la carcasa. Deberemos siempre intentar liberar a los karts en pistas con mucha goma en comparación con la puesta a punto cuando hay poca goma. Las medidas a tomar van a depender de varios factores, así como la puesta a punto inicial. En la parte trasera, los factores y parámetros a tener en cuenta son: dureza del eje, altura, material del cubo trasero, y la longitud del eje y del cubo.
En la parte delantera: comba, altura, avance y material del cubo. Por último, desde luego, la presión de los neumáticos.
En el pasado, se empleaban ejes más blandos para liberar la parte trasera del kart, mientras que, con los neumáticos más duros modernos, desde mi punto de vista, hay que hacer lo contrario: o sea, utilizar ejes más duros. Esto es también porque el peso aumenta, y, en pistas con muchos restos de goma, los ejes demasiado blandos tienden a flexionar, funcionando mal. Por eso hay que poner un eje más duro para liberar la parte trasera. Variar la longitud del eje es útil, pero tiene una repercusión menor: reducirla libera más la parte trasera, haciendo que el kart recorra más suavemente las curvas. Hay que tener en cuenta que, para lograr un efecto significativo, la longitud debe variar en por lo menos 2 cm por cada lado (4 cm en total).
Sin duda, la altura tiene un efecto considerable en la puesta a punto. En particular, levantando la parte trasera (que significa bajar el eje con respecto al chasis), hará que sea más fácil que se levante la rueda trasera interior en las curvas, clave para que el kart deje libres sus neumáticos traseros.
Levantar la parte trasera repercute también en la parte delantera, lo cual ayuda a liberar el kart, aunque en menor medida. Levantar la carrocería en la parte trasera respecto a la parte delantera reduce el ángulo de avance, reduciendo así la carga sobre las ruedas delanteras y, por lo tanto, el agarre.
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