WALTER BOSCHINI
CUANDO LAS GALLINAS DETUVIERON UNA CARRERA DE KARTS
TKART Staff
17 Septiembre 2018
Mi pasión por el kart arraigó en mí hace muchos años: en aquella época, mis padres y yo teníamos un taller y trabajábamos con motores de motos y ciclomotores. Un día, uno de mis clientes trajo el motor de un kart y me pidió que lo revisara y lo preparara. Yo le dije que no.
Pero él no se dio por vencido y, al cabo de unos meses de insistencia, cedí: “Dámelo, a ver si consigo entender cómo funciona”. El hecho es que no había visto nunca motores de esos y pensaba que me iba a topar vete tú a saber con qué. Sin embargo, después de abrirlo, me di cuenta de que era idéntico a los motores con los que estaba trabajando todos los días, o sea, los de las motos de dos tiempos.
Luego, bueno... ya se sabe cómo acaban estas cosas... Se va a correr una vez, por probar nada más, luego se organiza una carrera con los amigos, y al cabo de una semana nos vemos en la pista para competir. Todo ello, a fin de cuentas, sin tener ni idea de karts