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En sus diversas categorías, Rotax ha conseguido crear uno de los más exitosos campeonatos internacionales monomarca. Sus puntos fuertes son el rendimiento de su motor, su facilidad de manejo y la fiabilidad. 2017 ha visto cómo la empresa austriaca vuelve a jugar fuerte, introduciendo una serie de mejoras en la unidad de control del motor, en el alojamiento de la batería y su interruptor de encendido, en el sistema eléctrico y en el cilindro. Objetivo: seguir mejorando la fiabilidad y, factor muy importante, especialmente de la serie monomarca, normalizando aún más el rendimiento de los distintos motores.
Se ha trabajado mucho en la unidad de control (ECU) de los motores Rotax 125 Junior Max, 125 MAX, Micro y Mini MAX. En primer lugar, se ha cambiado su posición que ha pasado a la izquierda del alojamiento de la batería. Esta solución reduce el nivel de vibraciones de la ECU. Ha cambiado ligeramente el reglaje de encendido, que permite utilizar un chorro principal más caudaloso que mejora la respuesta del acelerador a bajas rpm al tiempo que el motor puede alcanzar las 14.800 rpm, límite del limitador de revoluciones. La nueva unidad de control "perdona" más si la calibración del carburador no es perfecta.
También es interesante lo que se ha hecho con el cilindro, que ahora incorpora una tecnología aún más avanzada, especialmente por estar mecanizada la lumbrera de escape con CNC (Computer Numeric Control). Esta solución, utilizada en los cilindros Rotax Max Junior 125, 125 Micro y Mini Max Evo, proporciona mayor rendimiento y calidadconsistentes, y, según Rotax, representa un nuevo punto de referencia en el mercado.
También es nuevo el alojamiento de la batería, que ahora tiene un pulsador con múltiples funciones. La conexión con el cableado es más directa, el nuevo interruptor es mejor, que el anterior con chaveta, protegido ahora contra la posibilidad de accionamiento involuntario.El cableado en general también ha sido revisado y ahora es más compacto y con conexiones simplificadas .