OKR y KZR. LOS SISTEMAS DE FRENADO PARA OK Y KZ, DE LA FIRMA K-KART

K-Kart quizás no sea uno de los nombres más conocidos en el mundo del karting, pero, en realidad, se trata de una empresa que cuenta hoy con una sólida experiencia y, con los años, ha sabido ganarse espacios importantes en el mercado y el aprecio de los aficionados. Nacida en 1992, con sede en la ciudad de Lučenec, en la zona centro-meridional de Eslovaquia (aunque más cercana a la húngara Budapest que a la capital, Bratislava), es fruto de la pasión y la experiencia de los hermanos Konopka.
Su campo de especialización es el de los accesorios para kart: desde piñones y coronas a portarodamientos, bujes, ejes y llantas (de aluminio y magnesio). Además de discos y sistemas de frenado, naturalmente.
En la última sesión de homologación, válida para el periodo 2018–2020, K-Kart ha presentado dos modelos de sistema de frenado: OKR y KZR, dedicados, respectivamente, como se puede intuir por su nombre, a las clases automático o de marchas.
Los productos K-Kart son elegidos por varios fabricantes para equipar sus propios karts, entre ellos, la empresa checa MS Kart, así como las italianas TB Kart y SRK.

Los nuevos sistemas de frenado K-Kart homologados en 2018 han sido optimizados en una importante serie de aspectos. Ante todo, se ha apostado por una mayor modularidad del sistema; una característica clave para su uso en los karts, en los que un sistema demasiado agresivo puede descomponer el chasis, sobre todo en caso de pilotos con poca experiencia. Para obtener este efecto, se han utilizado dos pistones de 30 mm de diámetro en la pinza trasera, mientras que otras opciones y calibrados adicionales provienen de la homologación de dos discos traseros, ambos autoventilados y perforados, con ligeras diferencias por lo que respecta a las elaboraciones superficiales.  Su tamaño varía: 15 mm de espesor y 181,5 mm de diámetro externo para el primer modelo; 17 mm y 192,5 mm, para el segundo. El sistema difiere también en los diámetros internos y externos de la zona de contacto de las pastillas de freno sobre el disco.
Naturalmente, para la versión KZ, el sistema está equipado con pinzas delanteras. Aquí, el pistón (uno sólo) tiene un diámetro de 25 mm, mientras que el disco, autoventilado y perforado, tiene un espesor de 12 mm y un diámetro de 157 mm.