Prohibido no, pero muy poco frecuente. Antes de nada, sin embargo, es necesario aclarar qué se entiende por rascar: utilizando una pistola de calor y una espátula, se limpia la superficie del neumático de cualquier resto o trozo de neumático recogido durante la actividad en pista. Se trata de un procedimiento que nunca se practica en el karting Junior/Senior, ya que los neumáticos se limpian solos tras unas pocas curvas gracias a la gran velocidad que alcanzan estos vehículos y al uso de compuestos blandos que facilitan la limpieza. Incluso en las categorías MINI, el raspado no suele realizarse y las razones son más o menos las mismas que acabamos de explicar. Las únicas y raras excepciones se dan en determinadas carreras, en las que los pilotos sólo disponen de unas pocas vueltas y en las que se utilizan neumáticos con compuestos especialmente duros, que por lo tanto son difíciles de limpiar directamente en la pista. Por esta razón, para ayudar un poco a los pilotos, los mecánicos bajo la carpa van a raspar la superficie del neumático, asegurándose de que una vez que salgan a la pista puedan pisar a fondo enseguida. Sin embargo, es un trabajo bastante arriesgado, sobre todo para el propio neumático: en primer lugar, eliminar "artificialmente" una capa de goma de la superficie del neumático puede dañar la carcasa, sobre todo si el raspado se hace de forma demasiado agresiva. Además, poner el neumático "en contacto" con una fuente directa de calor, como una pistola de calor, puede provocar la vulcanización de la goma, con la consiguiente pérdida de rendimiento, lo que hace que esta práctica sea contraproducente.