El nuevo Kosmic Mercury R es oficialmente el modelo del 2019. Pero, de hecho, ya se ha presentado a finales del 2018 ganando el campeonato del mundo CIK-FIA en la máxima categoría de marchas: la KZ. Un éxito prestigioso que confirma la calidad que, desde siempre, distingue a los productos del grupo OTK y, al mismo tiempo, pone de relieve las novedades, tanto técnicas como estéticas, que presenta la nueva versión del kart top de la gama de la marca Kosmic.

La versión que se distingue por llevar la letra “R” es la última creación del chasis Kosmic Mercury, cuya homologación caduca en 2020. La carrocería, que no ha variado en el tiempo, tiene todos los tubos principales con un diámetro de 30 mm, un diseño clásico y dos barras móviles que se pueden montar en la parte delantera y en la trasera. El paso estándar es de 1050 mm, variable mediante el uso opcional de las bridas desalineadas en 5 o 10 mm. Como todos los chasis realizados por el OTK Kart Group, el Kosmic Mercury es fruto de un proceso de soldadura completamente automatizado, que permite mantener intacta la calidad en todos los chasis producidos.

Aunque las geometrías y dimensiones de los tubos son iguales, hay diferencias respecto a la versión S anterior. A partir de los soportes del asiento que, en el Mercury R, llevan un bloque soldado al chasis, en el que se ajusta el estribo.

Otra modificación afecta a los soportes de fijación de la plataforma, ahora de sección reducida (un recurso que permite calentar menos el chasis en la fase de soldadura) y cambiados de posición para realzar la plataforma 7 mm. Un cambio que mantiene los tornillos alineados en la parte inferior del tubo del chasis y los dados más altos, evitando el contacto con la pista y el correspondiente consumo del auto-frenante del dado, con posible pérdida del tornillo. El cambio de posición de la plataforma ha alzado también la posición del depósito: esto ha obligado a los técnicos OTK a volver a diseñar el soporte de la barra de dirección, adaptando la altura de la dirección. Además, la barra de dirección ya no tiene el dado M10, sustituido por un M8 que permite usar una clave de 13, lo cual facilita las operaciones de recambio.

Entre las principales novedades de 2019, también está el cubo del volante, de aluminio forjado y, por primera vez, se entrega de serie inclinado: un aliado más para mejorar la posición de la conducción, a lo que se añade como opcional el espesor que OTK proporciona para acercar posteriormente el volante.

Siempre con la idea de aumentar la comodidad en la conducción, se ha renovado por completo el revestimiento en la zona del la sujeción del volante: la inserción de una goma de semi-silicona y ergonómica permite un agarre importante, facilitándole al piloto la sujeción y disminuyendo el cansancio de la conducción.