También TM Racing presenta su propuesta para el primer ciclo de homologación dedicado a la MINI, la categoría en la que la CIK-FIA ha reunido, bajo un único reglamento, la 60 MINI, que hasta ahora había sido administrada independientemente por las federaciones deportivas nacionales. El Mini2 (este es el nombre elegido por la empresa italiana para su segundo motor de 60 cc) es en buena medida la afinación de su afortunado predecesor, aunque incluye importantes novedades.
Pese a que TM Racing es, hoy día, una marca histórica del karting, su nombre aparece en la lista de la clase 60 cc solo desde 2015, el año en que entró en juego por primera vez con un proyecto totalmente nuevo. Un proyecto que bien pronto se reveló ganador y que fue sostenido con una gran inversión en términos de investigación y maquinaria, de la que ahora también recoge sus frutos el nuevo Mini2. De hecho, en contra de lo que instintivamente pudiera pensarse (cilindrada menor = motor más sencillo), llevar a cabo un motor de 60 cc refrigerado por aire e ir mejorándolo sucesivamente con los nuevos modelos, no es para nada fácil. Por ejemplo, la fabricación de un cilindro con aletas de contorno recortado, características de TM Racing, es mucho más costosa que la de un cilindro para el motor KZ. La cantidad de trabajo requerida en la fase de proyecto es bastante considerable y necesaria para maximizar las prestaciones, teniendo en cuenta la complejidad de los procesos afrontados en la fundición por lo que respecta a los moldes, los machos y sus respectivas cajas, y los distintos cortes sesgados que una forma tan articulada conlleva.