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Se sabe que los motores para vehículos deportivos, y las categorías de mayores prestaciones del karting no son ninguna excepción, están sujetos a desgaste, especialmente sus componentes sometidos a los máximos esfuerzos, debido a la fricción. En este sentido, uno de los "puntos débiles" de los motores KZ es el embrague, que es necesario comprobar frecuentemente. Cuando no funciona (porque patina o no se desengancha fácilmente), es necesario revisarlo. Y también si está dañado el material de fricción de los discos (un compuesto orgánico que puede absorber un pequeño porcentaje de impurezas sin patinar), porque se haya incrustado una piedra, o porque se haya desgastado de manera desigual. Para reparar el embrague y la transmisión más cómodamente, nuestra recomendación es desmontar el motor del kart. Aunque técnicamente, la operación puede llevarse a cabo con el motor sin desmontar. En este artículo, el Doctor TKART utiliza un motor IAME Parilla Shifter, pero el procedimiento es casi el mismo para todos los motores de engranajes y embrague seco.
Para empezar, con una llave de 14 mm, extraiga las pequeñas columnas que sujetan los muelles a la placa de presión. La bujía tiene que estar montada de manera que la compresión mantenga el pistón en reposo, sin haber tenido que meter ninguna marcha. Después de extraer los muelles, ya se puede retirar la placa de su alojamiento. A continuación, inclinando el motor, se extraen las placas de los engranajes conducido y conductor (resulta obvio que sería mucho más difícil hacerlo sin haber desmontado el motor).
En el banco de trabajo, separe las placas conductoras (revestidas de material de fricción) y las placas conducidas (sin revestimiento) para verificarlas. Verifique en las primeras que el material de fricción es homogéneo y que no está demasiado gastado, y que no está deformada la superficie de soporte entre el disco y la campana por los “golpes” del motor al cambiar las marchas. También hay que comprobar que las huellas dejadas por los discos a los lados de la campana no son demasiado profundas.
La placa conductora tiene la superficie revestida con material de fricción (que debe ser homogéneo y no excesivamente gastado) y una especie de “diente” sin material de fricción, contacto entre la placa y la campana (que no debe estar deformado).