La empresa AMV, situada en el noreste de Italia, en una zona con una gran vocación por el kart, nació en 1992, justamente como fabricante de llantas para kart. En 2008, fue adquirida por la familia Stefanello, la cual, como primer paso en su gestión, amplió la producción a otras piezas de magnesio para kart, como el portacorona, el soporte del disco, los bujes y los sistemas de frenado completos. Hoy, la fabricación por encargo de dichos productos es su actividad principal. A lo largo de los años, AMV se ha distinguido por su gran labor de investigación, que ha culminado recientemente con el desarrollo de la fundición de baja presión y el tratamiento OXiTECH, dos procesos de elaboración que permiten la fabricación de piezas de magnesio para kart de alta calidad y representan un nuevo paso hacia el futuro.