El Wankel es un motor de 4 tiempos cuya peculiaridad es que dispone de uno o más rotores que giran y ponen en rotación, a su vez, un cigüeñal, todo ello situado en el interior de un estátor, o más de uno. Este último es una especie de bancada de forma epitrocoide, en cuyo centro se halla, sujeto a la tapa lateral, un engranaje fijo que acciona el dentado presente en el interior del rotor, una pieza con tres lados convexos que hace de “pistón giratorio”. La relación de dentado es de 1,5: 1. En el centro del rotor también hay un alojamiento de tamaño considerable en el que se ensambla un cojinete. En este cojinete gira la excéntrica de un cigüeñal, el cual, junto con el dentado, determina el movimiento del rotor haciendo que los tres vértices, con sus respectivas juntas, toquen siempre la superficie del estátor, aislando tres cámaras de volumen variable. El cigüeñal con excéntrica está sujetado por los cojinetes instalados en las tapas laterales. El empuje del rotor sobre la excéntrica, gracias al brazo de palanca del eje (es decir, a la excentricidad), genera el par motor en el cigüeñal.