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TKART magazine Editorial | Karts de competición eléctricos: ¿futuro del deporte o mera locura?
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KARTS DE COMPETICIÓN ELÉCTRICOS:

¿FUTURO DEL DEPORTE O MERA LOCURA?

Yanek Sterzel
01 Noviembre 2024 • 5 min. de lectura

En el mundo del karting de alquiler, la motorización eléctrica está más extendida y es más popular. ¿Pero en el mundo de las carreras? ¿Tiene sentido? ¿Puede sustituir al motor de combustión interna? Nuestro director, Yanek Sterzel, tras probar el Rotax E20, piensa que...

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Lo digo ahora así me saco un peso de encima: conduje un kart de competición eléctrico y me gustó. Soy muy consciente de que como 'coming out' no puede valer el de Ralf Schumacher, y también es cierto que gracias a esta afirmación perderé la poca credibilidad que algunos amigos 'puros' del karting puedan seguir teniendo de mí. Porque para un kartista 'de verdad', combinar las palabras 'kart' y 'eléctrico' da escalofríos: el karting es mezcla, ruido, dos tiempos... Mientras que los eléctricos se asocian a las baterías, al gran peso que conllevan y a un solo tipo de kart: ¡Alquiler! Lo que los kartistas de competición rechazan, niegan, consideran blasfemo y a menudo ni siquiera consideran sea un kart. Que era también mi punto de vista hasta que probé el Rotax E20 (leer «Primer análisis | E20, el kart Junior/Senior de 40 CV totalmente eléctrico de Rotax») durante una carrera en el Trofeo Rotax Max Challenge Euro 2024 (leer «Una vez en la vida | “Una vez en la vida | “Soy un idiota: sin entrenar, corri con un kart electrico E20 en el Europeo Rotax y mori (de cansancio)“”). Después de esta experiencia, algo ha cambiado. Mi actitud,  fundamentalista y totalmente anti eléctrica quizás ya no lo sea. Lo que probé tenía las características de un auténtico Kart de carreras, a pesar de que el reglamento prevé un peso de kart + piloto de 220 kg, unos 50 kg más que un Shifter ya de por sí pesado y «físico». Nada que ver, sin embargo, con un Kart de alquiler, créanme. Pueden leer los dos artículos que he enlazado justo arriba para entender a qué me refiero, tanto en sensaciones de conducción como en características técnicas. Sobre todo, porque el motor a la derecha del piloto, 40 CV en modo calificación, los deja en el asfalto sin problemas. Lo justo para rodar en los mismos tiempos que los propulsores Direct Drive más potentes de la categoría Rotax MAX, los de la clase Senior. Esto de por sí te sitúa frente a un kart de verdad. Obviamente, el peso está ahí y se siente todo, especialmente en los brazos no entrenados de una persona de 43 años como yo. Sin embargo, en Rotax Racing consideran que la tecnología actual -entendida como el paquete "baterías-motor-inversor"- ya es obsoleta. 
 

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